Atelecsia


La ateltecsia es un trastorno caracterizado por el colapso pulmonar que dificulta el intercambio respiratorio de dióxido de carbono y oxígeno. Entre sus síntomas destacan la disminución de los sonidos respiratorios, el desplazamiento mediastínico hacia el lado del colapso y la aparición de fiebre y disnea creciente. Puede deberse a la obstrucción de las vías aéreas mayores y los bronquiolos, presión en el pulmón por presencia de líquido o aire en el espacio pleural o compresión de un tumor extrapulmonar. Como las restantes porciones del pulmón se hiperinsuflan, la saturación de oxígeno de la sangre suele ser casi normal. La pérdida de parénquima pulmonar funcional puede producir secundariamente aumento de la frecuencia cardiaca, de la presión arterial y de la frecuencia respiratoria. Las secreciones retenidas son ricas en nutrientes útiles para el crecimiento bacteriano, lo que con frecuencia favorece el desarrollo de una neumonía por estasis en los pacientes críticamente enfermos.

ATELECTASIA POSOPERATORIA (postoperative atelectasis) Forma de atelectasia en la cual el colapso pulmonar se debe a los efectos depresores de los anestésicos. Para evitar este trastorno hay que estimular a intervalos frecuentes la respiración profunda y la tos en el periodo posoperatorio.

ATELECTASIA CONGESTIVA (congestive atelectasis) Congestión pulmonar grave con lesiones difusas de la membrana alveolocapilar que originan edema hemorrágico, pulmones a tensión, alteraciones de la ventilación e insuficiencia respiratoria. La causa más frecuente es la sepsis fulminante, en especial si están implicados en ella microorganismos gramnegativos, pero puede aparecer a consecuencia de traumatismo, ahogo, aspiración gástrica, inhalación de sustancias corrosivas como cloro, amoniaco o fosgeno, ingestión de herbicida paraquet o de ciertos fármacos como barbitúricos, clorodiacepóxido, heroína, metadona, propoxifeno y salicilatos. También puede ser causada por cetoacidosis diabética, micosis, grandes alturas, pancreatitis, tuberculosis y uremia. El tratamiento debe ser el de la enfermedad subyacente, junto con medidas de sostén como son: el cambio postural del paciente con frecuencia para favorecer el drenaje, control de la hidratación, ventilación asistida y utilización de broncodilatadores y esteroides. Denominada también pulmón hemorrágico, pulmón bomba; pulmón rígido; pulmón húmedo.

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Categoría: Glosario Médico.




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