CÁNCER


CÁNCER (cancer) 1. Neoplasia caracterizada por el cre­cimiento incontrolado de células anaplásicas que tienden a invadir el tejido circundante y metastatizar a puntos dis­tantes del organismo. 2. Gran grupo de enfermedades neo­plásicas que se caracterizan por la presencia de células malignas. Cada tipo de cáncer se distingue por la natura­leza, asiento o evolución clínica de la lesión. No se conoce la etiología básica pero se admiten múltiples causas poten­ciales. Más del 80 % de los casos de cáncer se atribuyen al hábito de fumar, a la exposición a agentes químicos carcinogénicos, a radiaciones ionizantes y a los rayos ultravioleta. La exposición excesiva a la luz solar es la principal causa del cáncer de piel. Muchos virus inducen tumores malignos en animales y en algunos tumores humanos se han detectado también partículas víricas; sin embargo no existen pruebas contundentes que indiquen que ningún mi­croorganismo pueda producir cáncer en el hombre. La gran incidencia de diversos tipos de cáncer en determi­nadas familias hace pensar en la importancia de la susceptibilidad genética. Los receptores de trasplantes de órganos sometidos a tratamiento inmunosupresor sufren también una gran tasa de tumores malignos y ello indica que el sistema inmunológico desempeña una función importante en el con­trol de la proliferación de las células anaplásicas. El efec­to básico puede radicar en una anomalía bioquímica que ponga en marcha el crecimiento de las células anormales y potencie el metabolismo de la glucosa y que compren­da la reducción de ciertas proteínas y enzimas respirato­rias vitales. La incidencia de los distintos tipos de cáncer varía en gran medida con el sexo, la edad, el grupo étni­co y la localización geográfica. La tasa de muertes ajusta­da por edades para el cáncer oral es casi 10 veces superior en Hong Kong que en Dinamarca y, en el caso del cáncer de próstata, es más de 10 veces superior en Suecia que en Japon, mientras que la mortalidad por leucemia es si­milar en todo el mundo. En los Estados Unidos el cáncer es la segunda causa de mortalidad después de las cardio­palias en la población general y la primera en los niños entre los 3 y los 14 años de edad. Las localizaciones más frecuentes de tumores malignos son el pulmón, mama, co­lon, útero, cavidad oral y médula ósea. La cirugía sigue siendo la principal forma de tratamiento de este tipo de neo­plasias pero también se utiliza mucho la radioterapia co­mo tratamiento preoperatorio, posoperatorio o principal; la quimioterapia con agentes antineoplásicos únicos o en combinación suele ser también muy eficaz. Muchas lesio­nes malignas son curables si se detectan en sus primeras fases. Dependiendo de la localización, la señal de alarma puede ser un cambio en los hábitos intestinales u orinarios, la aparición de una úlcera que no cicatriza, una hemorra­gia o flujo anormal, la formación de un bulto en la mama o en cualquier otro lugar, la presencia de indigestión o dis­fagia, un cambio evidente en el aspecto de una verruga o lunar o una tos o ronquera persistentes.

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Categoría: Glosario Médico.




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