INCONTINENCIA


Incontinencia es la incapacidad para retener orina en la vejiga. La inestabilidad del detrusor es frecuente en los pacientes ancianos con enfermedad del SNC. Otras causas son: infección o tumor de vejiga o pelvis. impactación fecal, prolapso uterino e hiperplasia prostática. Debe tratarse la causa subyacente. La imipramina, 25 mg/d al acostarse, o los antagonistas del calcio pueden mejorar la continencia. La incontinencia de esfuerzo, o escape de pequeñas cantidades de orina con el incremento de la presión intraabdominal, es frecuente en las mujeres postmenopáusicas que han tenido hijos. Puede resultar útil la elevación quirúrgica del ángulo uretrovesical, la reposición estrogénica o ambas. En el varón, las causas son la cirugía prostática y el cáncer de próstata. La incontinencia mecánica por anomalías congénitas (extrofia vesical, uraco permeable o aperturas uretrales ectópicas) puede ser corregible quirúrgicamente. Otra causa alternativa puede ser la cirugía o la radiación prostática o pélvica. La incontinencia por rebosamiento es debida a la presencia de grandes volúmenes residuales de orina secundarios a obstrucción del cuello de la vejiga, obstrucción uretral (estenosis, hipertrofia prostática benigna) o lesión neurológica (enfermedad de la médula espinal, neuropatía periférica, enfermedad colágeno-vascular, neuropatías tóxicas).
Enuresis es la emisión involuntaria de orina por la noche o durante el sueño. La mayoría de los casos cesan a los 3 años de edad. Cuando la enuresis persista después de esta edad, es preciso descartar una enfermedad orgánica (infección urinaria. Lesiones obstructivas, disfunción neurovesical, procesos poliúricos). Las enfermedades orgánicas suelen causar también incontinencia diurna. La imipramina (75 mg/d al acostarse) puede ser útil.

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Categoría: Glosario Médico.




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