Crisis de angustia


Se caracterizan por una sensación brusca e inesperada de terror o aprensión con síntomas somáticos asociados. Se estima que ocurre en un 12 % de la población con una relación hombre-mujer de 2.1. Tiende a ser familiar, de comienzo en el segundo o tercer decenio, y puede coexistir con un trastorno del estado de ánimo. El Manual Diagnóstico y Estadística de los Trastornos Mentales, en su tercera edición revisada (DSMIIIR), desarrollado por la Asociación Psiquiátrica Americana, da criterios específicos para su diagnóstico: (1) al menos 4 crisis de angustia en 4 semanas en lugares no amenazantes y en situación de reposo físico, desencadenadas por estímulos no fóbicos, y (2) las crisis se manifiestan por episodios bien diferenciados de aprensión o miedo v al menos 4 de los síntomas siguientes:
disnea, palpitaciones, dolor torácico o malestar, sudoración sofoco, sensación de ahogo, mareo, vértigo, sensación de inestabilidad, desmayos, sentimientos de desrealización, parestesias, oleadas de calor y frío, temblores, y miedo a volverse loco, a morir o a perder el control.

Hallazgos de laboratorio
. Las inyecciones de lactato IV precipitan las crisis de angustia aproximadamente en la mitad de los casos.

Diagnóstico diferencial
La dificultad diagnóstica radica en diferenciar las crisis de las enfermedades cardiovasculares a las cuales remedan. Puede haber un aumento de la prevalencia de prolapso de la válvula mitral en los pacientes con crisis de angustia. También pueden simular crisis de angustia los síntomas que se asocian a hiper o hipotiroidismo, feocromocitoma, crisis parciales complejas, hipoglucemia, ingestión de drogas (anfetaminas, cocaína, cafeína, descongestivos nasales con acción simpaticomimética), y abstinencia a drogas (alcohol barbitúricos, opiáceos, tranquilizantes menores).

Tratamiento.
Los antidepresivos tricíclicos o los inhibidores de la monoaminooxidasa tienen un 80-90 % de efectividad en el tratamiento y la prevención de las crisis espontáneas. El alprazolan (Xanax), a dosis altas (24 mg diarios), es tan efectivo como los antidepresivos, con menos efectos secundarios y con una mayor rapidez de acción ( 12 días). No se han demostrado efectivas otras benzodiacepinas. Los betabloqueadores pueden disminuir los síntomas somáticos pero son ineficaces en la prevención del miedo o pánico.

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Glosario Médico.




Deja una respuesta