EpidemiologÃa de la cardiopatÃa isquémica
Las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de mortalidad en todo el mundo. Comprenden el accidente cerebro-vascular, la cardiopatÃa isquémica y la arteriopatÃa periférica. En la mayorÃa de paÃses desarrollados se ha producido un descenso de la mortalidad por enfermedades cardiovasculares en los últimos 20-30 años.
La estrategia poblacional, basada en la educación sobre medidas higienicodietéticas generales, es la que permite una mayor reducción de la mortalidad, ya que la mayor parte de las muertes ocurren en individuos con un perfil de bajo riesgo (que son la mayorÃa de la población)
- El principal marcador de riesgo para las enfermedades cardiovasculares es la edad. Otro marcador importante es el sexo masculino. Sobre estos dos factores no es posible ningún tipo de acción.
- Es un factor de riesgo coronario indiscutible la hipercolesterolemia (colesterol total >200-220 mg/dl, LDL-colesterol >160 mg/dl y/o HDL-colesterol.
- El tabaquismo es un potente factor de riesgo de aterosclerosis, constituyendo el más importante de los factores de riesgo modificables por su prevalencia y porque cuando se reduce o elimina, disminuye claramente el riesgo de desarrollo de aterosclerosis. Existe un riesgo de CI tres o cuatro veces mayor en un varón que fuma un paquete al dÃa con respecto al que no fuma, existiendo una clara relación dosis-respuesta. Esta relación es menor para las mujeres. Los pacientes que dejan de fumar muestran una rápida disminución del riesgo de CI, pudiendo alcanzar el mismo riesgo que los no fumadores en unos años, tras el abandono del tabaco. El tabaquismo no es un factor de riesgo para el desarrollo de HTA
- La HTA es un importante factor de riesgo, sobre todo para CI y enfermedades cerebrovasculares (ECV). Se afectan igualmente los varones que las mujeres, siendo importante la presión sistólica, especialmente en personas mayores de 50 años, y la diastólica, especialmente en jóvenes. El aumento del riesgo relativo es mayor para la ECV que para la CI. La reducción farmacológica de la TA se asocia a una disminución de la incidencia de CI, insuficiencia cardÃaca e ictus El tratamiento no farmacológico incluye disminuir la ingesta de sodio ( • El riesgo de CI aumenta en los diabéticos insulino y no insulinodependientes. En ellos, el control de los factores de riesgo ha de ser mucho más exigente. En estos, sobre todo si presentan nefropatÃa diabética, es adecuado disminuir la TA por debajo de 130/80
- Otros factores de riesgo coronario más dudosos o menos importantes son la elevación de la lipoproteÃna (a), la hipertrigliceridemia, el sedentarismo, la obesidad, el estrés psÃquico, la historia familiar, los antecedentes de ACVAs, la hipercoagulabilidad (hiperfibrinogenemia, hiperhomocisteinemia, etc.) y otros.
- Los estrógenos en las mujeres ejercen un papel protector. Sin embargo, hasta el momento no se ha demostrado que el tratamiento con terapia hormonal sustitutiva en la menopausia disminuya el riesgo de cardiopatÃa isquémica.
- El consumo de alcohol tiene un efecto en «J». Consumos reducidos parecen ser protectores, mientras que consumos elevados son perjudiciales (parecen elevar el riesgo de cardiopatÃa isquémica y el de miocardiopatÃa alcohólica).
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Categoría: CardiologÃa.
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