HTA HIPERTENSIÓN ARTERIAL
La HTA es uno de los problemas de salud más importantes, pues tiene una prevalencia del 15-20% y constituye uno de los principales factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares, principal causa de muerte en los países desarrollados. Parece que tanto la elevación de la PAS como la de la PAD constituyen un factor de riesgo cardiovascular.
Llamamos “HTA maligna” a la HTA que llega a provocar edema de papila y que suele acompañarse de elevaciones muy importantes de la PA. Puede acompañarse de encefalopatía hipertensiva, descompensación cardíaca y deterioro de la función renal. Se asocia a aterosclerosis hiperplásica y necrosis fibrinoide y puede cursar con anemia hemolítica microangiopática. Tiene muy mal pronóstico si no se trata, sobre todo en varones mayores de 40 años.
Por “HTA acelerada” entendemos aquella HTA en la que se han elevado considerablemente los valores de la PA en poco tiempo y en la que hay alteraciones vasculares en el fondo de ojo, pero sin llegar a producir edema de papila.
Las “crisis hipertensivas” son elevaciones de la PA por encima de 200/110-120 mmHg, que provocan compromiso orgánico agudo. Hablamos de “emergencia hipertensiva” cuando la importancia del compromiso orgánico obliga a reducir la PA en menos de una hora. Esto ocurre cuando la crisis hipertensiva se asocia a encefalopatía hipertensiva, isquemia o insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal. Es necesario el tratamiento inmediato del paciente en una unidad de cuidados intensivos con fármacos intravenosos. Sin embargo, no se recomienda realizar un descenso demasiado brusco de las cifras de presión arterial. El nitroprusiato, la nitroglicerina, la furosemida, el urapidil y el labetalol son fármacos muy útiles en este contexto. Cuando no es necesario normalizar la PA en menos de una hora, sino en unas 24 horas, debido a que el compromiso orgánico no compromete la vida a corto plazo, hablamos de “urgencia hipertensiva”. En las urgencias hipertensivas el tratamiento debe ir enfocado a disminuir las cifras de presión arterial en las siguientes 24 horas, sin que sea necesario el ingreso hospitalario. El tratamiento inicial se hace con fármacos por vía oral, como el captopril, la furosemida o el amlodipino. Se debe evitar el uso de nifedipino de acción rápida,
ya que puede producir hipotensión y taquicardia refleja, pudiendo desencadenar isquemia miocárdica
Ante una elevación de la PA hay que confirmar el diagnóstico de HTA midiendo la PA en varias ocasiones durante 2 ó 3 semanas. Además, hay que considerar la posibilidad de que se trate de una “pseudohipertensión ”, o elevación de la cifra de la PA por una arteria braquial rígida que se comprime con dificultad por el manguito del esfingomanómetro; ésta se sospecha por el signo de Osler (palpación de la arteria radial después de la desaparición del pulsoDeben incluirse en el estudio de todo paciente hipertenso para descartar complicaciones y una etiología secundaria, los estudios complementarios básicos (hemograma, creatinina, BUN, análisis de orina, iones en sangre, glucosa, lípidos, ECG y Rx de tórax)
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Categoría: Glosario Médico.
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