Tengo un hijo de 3 años y 5 meses y tengo 8 meses de embarazo. Él es hiperactivo con deficit atencional


El niño está pasando por un periodo critico del desarrollo, que va desde los 2 años y medio a los 3 años y medio, al cual se le llama periodo de oposición, donde los niños se ponen voluntariosos, opositores, mas desobedientes, tercos y mas agresivos cuando son frustrados o se les pone límites; sin embargo este es un momento normal del desarrollo, que no acarrea dificultades si quienes rodean al niño logran manejarlo adecuadamente.

El caso escapa de lo esperable para la edad; Es aún muy temprano para hablar de déficit atencional. Por otra parte, si el niño logra controlarse y ajustarse a las normas de la escuela de lenguaje, esto hace pensar que el conflicto se encuentra en la relación con la madre, aunque no sabemos si estas dificultades se dan con otras figuras significativas.

Sería necesario saber si existe una historia de problemas en la relación con la mamá, o si bien es algo que se ha gatillado exclusivamente en este periodo; si esto es así, puede tener que ver con el embarazo. Sin embargo, aun cuando fuese así, hay que cuidar la relación con el niño, pues no es una reacción dentro de lo normal y esperable. Si el niño se muestra tan agresivo habría que ir, gradualmente, sanando la relación entre ambos; si la mamá trabaja y con quien pasa el niño durante el día, son datos importantes. De ser así, es importante comenzar a pasar tiempo juntos y compartir momentos agradables, en que hagan actividades, paseos, etc.

No se deben tolerar sus gritos y agresiones. Da mucha rabia el hecho del mal trato , y aunque el tenga rabia la madre no debe encajar en la misma rabia. No contestarle, el silencio puede ser una herramienta muy poderosa a la hora de educar y poner normas y reglas; pero no hay que gritar ni castigar. Al responder así, nos ponemos al mismo nivel que el niño, y no desde una postura de autoridad. La autoridad debe ser consistente, clara y a la vez afectuosa y protectora. No se debe tolerar ninguna conducta negativa. Hay que poner límites, pero sin perder el control, ya que el niño aun es muy pequeño, y los gritos y rabietas son una expresión normal de la rabia a esta edad, pero la madre puede controlar su reacción.

Una buena relación de los niños con su madre, es uno de los factores protectores del desarrollo mas significativos; por eso recomiendo consultar nuevamente si las cosas no cambian. Además se acerca el nacimiento de otro hijo, que puede hacer la situación mas tensa y difícil de manejar para la madre. Aún es muy pequeño y pueden lograr recomponer una buena relación entre ambos, pero si se mantiene el conflicto, puede traer consecuencias negativas significativas para los dos.

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Consejos para Mamá.




Deja una respuesta