Baja de las defensas: El contradictorio lado bueno del sol


Los rayos ultravioleta debilitan el sistema inmune y eso representa la solución para enfermedades como alergia, psoriasis, linfomas cutáneos, vitiligo, para eso se usa puvaterapia.
De astro rey y dios de las culturas más antiguas, el sol pasó a ser satanás debido a su influencia en la aparición del cáncer de piel y el envejecimiento cutáneo precoz. Sin embargo, los rayos solares son necesarios para la vida y tienen otros efectos muy beneficiosos para la salud: permiten ver, modifican la producción de ciertas hormonas, ayudan en la síntesis de vitamina D y disminuyen la actividad del sistema inmune.

Si bien es cierto que esta baja de las defensas producida por los rayos ultravioleta A (UVA) tiene su lado negativo (ver recuadro), también puede ser la solución para algunas enfermedades.

El sol emite luz visible, infrarroja y ultravioleta. La doctora Tatiana Riveros, dermatóloga de Clínica Alemana, explica que los rayos UVA y los UVB, en menor medida, eliminan las células de la piel responsables de reconocer los cuerpos extraños (células de Langhans) e ir a la médula ósea a inducir la producción de anticuerpos para ese antígeno. Al no haber anticuerpos, no se generan reacciones defensivas del organismo, como la inflamación. Por eso los rayos UVA son útiles en el tratamiento de patologías donde el sistema inmune tiene alguna alteración o donde hay invasión de las capas profundas de la piel por células inflamatorias o por glóbulos blancos anormales.

El vitiligo, las alergias cutáneas crónicas, la psoriasis, la esclerodermia, la alopecia areata total, los linfomas cutáneos y los trasplantes de médula ósea se ven favorecidos por la exposición solar. Pero, para que este beneficio no sea vea afectado por el daño que provocan los rayos UVB, se creó un tratamiento especial, donde sólo se emiten rayos UVA, llamado puvaterapia. Ésta consiste en varias sesiones de radiación acompañadas del uso de psoraleno oral o local, una sustancia que se absorbe en la piel y permite que los rayos UVA lleguen a un nivel más profundo.
La dermatitis alérgica crónica se caracteriza por una reacción exagerada del sistema inmune ante agentes que no son peligrosos. Por eso eliminar células defensivas de la piel, que son las que actúan descontroladamente, es útil para controlar la enfermedad y sus síntomas (lesiones cutáneas como piel engrosada y costrosa).
Vitiligo

El vitiligo consiste en una alteración en los melanocitos -células productoras del pigmento de la piel- producida por factores inflamatorios. Entonces, el tratamiento ataca a las células que responsables de la presencia de factores inflamatorios.

La esclerodermia y alopecia areata son enfermedades de origen autoinmunes en que estructuras propias son atacadas por células defensivas. En la esclerodermia se producen anticuerpos que destruyen el tejido de sostén de la piel (colágeno) y en la alopecia areata éstos acometen contra el bulbo piloso.
Psoriasis

En la psoriasis se da una reproducción exagerada de células de la base de la piel y fenómenos inflamatorios de las capas más profundas, lo que provoca que ésta sea roja, gruesa y al remover la escama blanquecina de su superficie, sangre. Con la puvaterapia se atacan las células basales, que son las que se multiplican excesivamente y se eliminan las inflamatorias acumuladas en las capas profundas.

Para los trasplantes de médula ósea, éste es un tratamiento complementario que ayuda a disminuir el efecto del rechazo a nivel cutáneo. De esta forma se eliminan los glóbulos blancos que rechazan al huésped y producen manchas similares a las alérgicas y a las de la esclerodermia.

En el caso de los linfomas cutáneos, los glóbulos blancos malignos que infiltran las capas profundas de la piel son el blanco de la puvaterapia.

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Categoría: Preguntas y Respuestas.




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