Complicaciones del SAOS


Las complicaciones del SAOS se enumeran en la tabla 5.III. En relación
a las complicaciones cardiocirculatorias, la hipertensión arterial es la más importante. Se sabe que durante la apnea existe un incremento de la presión arterial sistémica posiblemente relacionada con una descarga adrenérgica. La consecuencia es que en torno al 50% de pacientes con SAOS presentan hipertensión diurna. Las alteraciones del ritmo cardíaco más frecuentes en los pacientes con SAOS son la bradicardia, que se observa durante la apnea, seguida de una taquicardia refleja cuando se recupera la permeabilidad de la vía aérea coincidiendo con un despertar. Las extrasístoles ventriculares y otro tipo de arritmias (bloqueo atrioventricular, bloqueo sinusal) se observan principalmente en aquellos enfermos con periodos prolongados de hipoxemia. La función del ventrículo izquierdo puede afectarse en los enfermos con SAOS. La intensa presión intratorácica negativa que se genera como consecuencia de la obstrucción de la vía aérea superior, reduce el gasto cardiaco al aumentar la poscarga y disminuir la precarga del ventrículo izquierdo. A la larga, este mecanismo podría ser causa de hipertrofia y disfunción del ventriculo izquierdo. También la hipoxemia intermitente podría interferir en la contractibilidad del miocardio, contribuyendo al deterioro de la función cardiaca. Durante los periodos apnea se produce un incremento de la presión arterial pulmonar, que se normaliza al restaurarse la respiración. Entre un 5 a 10% de los enfermos con SAOS desarrollan hipertensión arterial pulmonar y cor pulmonale. Finalmente, se ha considerado el SAOS entre los factores de riesgo responsables de la cardiopatía isquémica y de la enfermedad vascular cerebral aunque se precisan más estudios que clarifiquen estas posibles asociaciones.
A la larga, la falta de un descanso nocturno adecuado es motivo de alteraciones psicológicas en las relaciones familiares y laborales de estos enfermos. De igual manera, se puede apreciar un deterioro intelectual caracterizado por dificultad en la concentración y pérdida de memoria. En ocasiones, estos pacientes pueden acudir inicialmente al psiquiatra por depresión. Las alteraciones de la función sexual (disminución de la líbido e impotencia) son síntomas relativamente frecuentes y, probablemente también son secuela de la falta de sueño reparador.

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Categoría: Glosario Médico.




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