Tétano: Difícil de tratar, fácil de prevenir


«Si encuentras que el cuerpo de este hombre está rígido por motivo de la influencia de una herida en la piel, colocarás tu mano sobre él mientras se agita en convulsiones. Pero si hallas su rostro bañado en sudor, los ligamentos de su cuello tensos, su cara cianótica, sus dientes y su espalda tiesos, el olor de su caja craneana como la orina de los carneros, su boca crispada y las cejas torcidas, sin poder respirar por la rigidez de su cuello, entonces es una enfermedad en la que no se puede hacer nada».

Aunque no lo crea, el párrafo anterior data del año 1550 antes de Cristo, época de la XVIII Dinastía Faraónica y corresponde al primer papiro médico conocido por la historia. Denominado Papiro Ebers, fue encontrado en 1862 por Edwin Smith, un arqueólogo aficionado, a los pies de una momia en la antigua ciudad de Luxor. Posteriormente, fue vendido en una considerable suma de dinero al egiptólogo George Ebers, de donde se desprende su nombre.

La Universidad de Leipzig, donde se guarda la pieza, ha calificado este párrafo como la primera descripción de los síntomas del tétano, una enfermedad que al parecer es tan antigua como las pirámides. Sin embargo, el paso de los milenios no ha sido suficiente para detener los estragos que ha causado en millones de seres humanos. Probablemente, la mezcla de mitos, verdades a medias y algunos conocimientos mas bien sesgados, han contribuido para propagar sus efectos hasta el día de hoy. Por lo mismo, es necesario explicar en qué consiste esta patología, cómo se manifiesta y por qué puede ser fatal.

El tétano puede ser definido como «una enfermedad producida por una bacteria, denominada Clostridium tetani, que tiene la capacidad de liberar una toxina en el cuerpo, que finalmente es la responsable del cuadro clínico que caracteriza al tétano», explica la doctora María Alejandra Marcotti, infectóloga de Clínica Alemana.

La forma más usual de contraer la enfermedad es a través de heridas contaminadas con tierra, pues la bacteria es un elemento habitual en el medio ambiente. Si sus esporas entran en la herida, germinan y producen una toxina que empieza actuar como veneno. Entonces, se difunde por los diferentes tejidos del organismo y comienza a afectar al sistema nervioso causando la enfermedad.
egún la doctora Marcotti, actualmente se puede hablar de tres clases de manifestaciones de esta patología. «Existe lo que se llama tétano localizado, que es el que afecta a los músculos que están cerca de la herida. En segundo término, está el tétano cefálico que se concentra en los músculos de la cara y por último, se presenta la variante generalizada de la enfermedad. Es el tipo de tétano más peligroso por que compromete a toda la musculatura del organismo y si no es tratado de manera adecuada, puede ser fatal», comenta la especialista.

Antiguamente, existía una cuarta manifestación que se llamaba tétano neonatal, que se producía en los recién nacidos, debido a que el instrumental quirúrgico que se utilizaba para cortar el cordón umbilical estaba contaminado con la bacteria. Este tipo de la patología era particularmente grave e involucraba una alta tasa de mortalidad. «Hoy en día, este tétano ya casi no existe. La creciente y permanente mejoría de la atención hospitalaria han erradicado esta clase de tétano, por lo que no representa un problema real en Chile», señala la doctora Marcotti.

Síntomas, tratamiento y prevención del tétano
Una vez que la persona ya se ha contagiado de tétano y la toxina ha empezado a recorrer su organismo, el cuadro clínico se caracteriza fundamentalmente por la presentación de espasmos musculares muy intensos y dolorosos, acompañados con una rigidez de la musculatura. Según las estadísticas, el tiempo desde la entrada del germen hasta la aparición de los primeros síntomas es muy variable. En ese sentido, la infectóloga destaca que «mientras más pronto aparezcan los síntomas, se está en presencia de un caso más grave. Es decir, la precocidad del cuadro clínico es indicativo de mal pronóstico, configurando un caso serio con un alto riesgo para la salud».

El diagnóstico de la enfermedad es esencialmente clínico y se fundamenta en dos elementos: la presencia de una herida, lo que indica la primera sospecha médica de que la persona puede estar contagiada, y la constatación de que el sujeto experimenta espasmos musculares. La doctora Marcotti explica que «no hay un examen específico para el tétano. Si llega una persona con ciertos síntomas, se realizan algunos exámenes para descartar otros orígenes de la rigidez muscular, como las intoxicaciones, dentro de las cuales la más similar al tétanos es la causada por estricnina. Por lo mismo, el cuadro clínico es sin duda, el componente más importante, eficaz y útil para el diagnóstico de esta enfermedad».

La gravedad del tétano tiene relación justamente con la parálisis muscular que provoca. Se calcula que uno de cada tres personas adultas que contraen la enfermedad, mueren. «El tétano generalizado es el más peligroso y complicado de los tres tipos. Puede presentarse una contracción de la musculatura de la vía aérea , ya que la rigidez también incluye a los músculos respiratorios» advierte la profesional de Clínica Alemana.

Por lo mismo, el tratamiento del tétano es un procedimiento muy completo que incluye dos líneas de acción. La doctora Marcotti explica que «esta doble estrategia es la mejor opción para lograr la recuperación del enfermo. En primer lugar, si la persona tiene un tétano generalizado que compromete su capacidad respiratoria, se realiza un tratamiento en la Unidad de Cuidados Intensivos, destinado especialmente a la mantención de la ventilación y a la protección de la respiración.

Además, se le administra benzodiacepina para disminuir los espasmos musculares. En segundo término y paralelamente a esta terapia, la persona es sometida a un tratamiento antibiótico, destinado a matar la bacteria. También se le proporciona inmunoglobina antitetánica, que aporta anticuerpos para la defensa contra la toxina; y se le administra la vacuna, que ayudará a crear nuevos anticuerpos».

Como el tétano se considera una enfermedad grave, que según determinados casos puede causar la muerte de hasta el 60% de los casos generalizados, la mejor oportunidad para luchar contra ella, está en su prevención.

Se sabe que el tétano es una patología inmunoprevenible, por lo tanto la vacuna es un arma esencial para evitar su contagio. En los más pequeños, se aplica la denominada TETRACTHIB, que se administra a los 2, 4 y 6 meses. Aparte de proteger contra el tétano, previene otras enfermedades como hib, difteria y coqueluche. A los 18 meses y a los 4 años se aplica la vacuna TRIPLE (DTP), que refuerza las defensas contra la enfermedad.

La infectóloga de Clínica Alemana comenta que «como se aprecia, en el calendario de la vacunación pediátrica se considera muy claramente la inmunización contra el tétanos. La vacuna, administrada en los tiempos y dosis adecuados, protege a los niños hasta los 15 ó 18 años. Luego de esa edad, los adultos quedan totalmente indefensos. Por lo mismo, es ideal que estas personas se pongan un refuerzo de la vacuna cada 10 años. De esta manera, no tendrá ningún riesgo de contraer tétano».

Para Tener en Cuenta…
En caso de sufrir una herida contaminada con tierra o con un material metálico oxidado, es recomendable asistir a un servicio de urgencia, donde además de limpiarla adecuadamente, se le administrará la vacuna contra el tétano.
Los síntomas de esta enfermedad pueden parecerse a los de otras condiciones médicas. Por lo tanto, ante la menor indicación de sospecha consulte a un médico para un diagnóstico certero, rápido y seguro.
El tétano no es una enfermedad contagiosa entre las personas, por lo tanto no debe haber desconfianza hacia el enfermo.
Pocas situaciones tan graves, como el tétano, son tan fáciles de prevenir. En la niñez y adolescencia la persona está protegida por las vacunas que se administran en los primeros meses de vida. Luego basta un refuerzo cada 10 años para evitar su contagio.

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Categoría: Glosario Médico.




One Response to “Tétano: Difícil de tratar, fácil de prevenir”

  1. Daiana Dice:

    Estoy preparando una charla para la facultad sobre este tema y la verdad que leer este «articulo» me ayudo mucho a la explicacio y a entender..
    Muy bueno.
    Dai


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