Traramiento Taponamiento cardíaco


El tratamiento consiste en evacuar el líquido pericárdico y, de esta manera, reducir la presión intrapericárdica. En los casos extremos debe practicarse de inmediato pericardiocentesis, esté donde esté el paciente, ya que se trata de una auténtica emergencia. La evacuación del derrame se puede realizar mediante dos técnicas:
1) La punción pericárdica. Se realiza introduciendo una aguja con un electrodo precordial conectado a ella para avisar de cuándo tocamos el corazón (también es posible la punción ciega o guiada por ecocardiograma). El punto de penetración habitual es el ángulo que se forma entre el apéndice xifoides y el arco costal izquierdo. Un catéter pericárdico puede dejarse colocado durante varias horas o incluso algunos días.
2) Ventana pericárdica. Cuando hay tabicación, derrame purulento o etiología urémica, es la técnica de elección.
Como medida complementaria, es importante expandir el volumen sanguíneo con suero salino, dextrano o sangre.
Está totalmente contraindicado el uso de diuréticos para disminuir la presión venosa.

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Glosario Médico.




Deja una respuesta