Aumento en las vacaciones: Para volver al peso normal


Las vacaciones son el momento más esperado del año. Una buena playa, harto sol y excelente compañía es a lo que todo el mundo aspira en esos escasos días donde el terno y la corbata quedan colgados en el clóset. Pero, como no todo lo que brilla es oro, al finalizar el verano se presenta otro problema: tanto relajo puede traer consigo unos kilos de más.

Como explica la doctora Carolina González, nutrióloga de Clínica Alemana, el aumento de peso en vacaciones se produce porque la gente se descuida, come más de lo habitual y consume alimentos que son hipercalóricos. Además, hay más tiempo para alimentarse, las sobremesas duran horas y las cuatro comidas se hacen sentadas y con la suficiente calma como para comer más de la cuenta.

«Los hoteles todo incluido implican que hay comida disponible las 24 horas del día, lo que es nefasto para mantener el peso. Los veraneantes no mantienen los hábitos y se alimentan a lo largo de todo el día», agrega la especialista.

¿Qué hacer?
De acuerdo con la nutrióloga, la mayoría de las personas que regresa de vacaciones sabe a ciencia cierta si subió o no, porque lo nota en la ropa. En cambio, quienes tienen sobrepeso, habitualmente rehuyen a la pesa y por eso no saben cuántos kilos aumentaron.

Así como para engordar, necesariamente se ingirió más de lo que se gastó; la única forma de adelgazar es mediante un balance calórico negativo, es decir, gastar más de lo que se consume.

La especialista aclara que las personas que manejan pesos normales, habitualmente no necesitan consultar, porque no tienen malos hábitos, sino que sólo se relajan un poco en un periodo puntual. En las semanas siguientes vuelven a su sistema y recuperan su peso normal.
Es posible que las personas con sobrepeso, se relajen aún más y aumenten desde tres hasta seis u ocho kilos, los que suelen mantener, ya que tienen un problema que arrastran hace tiempo. «Una dieta flash no les sirve, porque sólo permite bajar parte de lo se que subió en las vacaciones y una vez que termina, vuelven a los malos hábitos y pronto recuperarán esos kilos. Después, en las siguientes vacaciones suben nuevamente, hasta que llegan a la consulta con 25 o 30 kilos de más», afirma la especialista.

En este caso es necesario comenzar un tratamiento médico a largo plazo con el fin de evitar complicaciones de salud graves.

«Lo importante es preocuparse de volver al peso anterior y evitar quedarse con kilos encima», recomienda la nutrióloga y agrega: «No existe ningún tratamiento para bajar de peso que sea fácil y definitivo. Por lo tanto, cualquier esfuerzo o cierto grado de conciencia que se tenga para evitar descontrolarse es importante».

«Ellos pueden hacer una dieta flash de unas semanas para bajar los dos a tres kilos que subieron y luego volver a sus hábitos. Si siguen comiendo con restricción, se demorarán un poco más, pero igual los van a bajar. Sin embargo, si alguien está angustiado porque quiere llegar rápidamente a su peso normal, una dieta rápida le va a servir. Lo que se considera normal es bajar un kilo a la semana», ilustra la doctora González.

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Categoría: Nutrición y Dietética.




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