Empiece a cuidar los dientes del bebé temprano

A la caries dental en bebés y niños se le llama caries de biberón. Puede destruir los dientes y, en la mayoría de los casos, esto ocurre en los dientes frontales superiores. Pero otros dientes pueden ser afectados también.

La caries ocurre cuando se alimenta a un niño con líquidos endulzados y se dejan en la boca por períodos prolongados. Muchos líquidos causan problemas, incluyendo la leche, fórmula para bebes y jugos de frutas. Las bacterias que se encuentran en la boca utilizan los azúcares en estos líquidos como alimento y producen ácidos que atacan los dientes. Cada vez que su bebé bebe estos líquidos, los ácidos atacan por períodos de 20 minutos o más. Después de varios ataques, los dientes pueden cariarse.

No es solamente lo que usted pone en el biberón de su niño lo que causa caries, sino con qué frecuencia y durante cuánto tiempo cada vez. Darle un biberón con líquido endulzado a su niño varias veces al día no es buena idea. Permitir que su hijo se duerma con el biberón durante las siestas o por las noches también puede causarle daño a sus dientes.

Algunas veces los padres no se dan cuenta que los dientes de un bebé pueden cariarse rápidamente después de aparecer en la boca. Para cuando los padres se percatan de la caries, podría ser muy tarde para salvar los dientes. Usted puede ayudar a prevenir que esto le suceda a su niño siguiendo los siguientes consejos:

Después de cada comida, limpie las encías del bebé con una venda de gasa. Inicie el cepillado de dientes de su niño cuando aparezca el primer diente. Limpie y frote las encías en las áreas que aún no hay dientes y comience a utilizar el hilo dental cuando hayan salido todos los dientes de leche, usualmente es a los dos años de edad.
Nunca permita que su niño se duerma con un biberón que contenga leche, fórmula para bebé, jugo de fruta o líquidos endulzados. Si su niño necesita un chupete entre comidas regulares, durante la noche o durante las siestas, déle al niño un chupete limpio recomendado por su odontólogo o médico. Nunca le dé a su niño un chupete untado con cualquier líquido dulce.
Evite llenar el biberón de su niño con líquidos como agua azucarada o refrescos.
Inicie con las visitas dentales en el primer año del niño. Haga sus visitas de forma regular. Si cree que su niño tiene problemas dentales, lleve al niño al odontólogo tan pronto como sea posible.

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