Pacientes con epidermolisis bulosa fueron sometidos a cirugías esofágicas


Con el objetivo de mejorar su calidad de vida, seis pacientes de entre 3 y 24 años con epidermolisis bulosa fueron sometidos el miércoles 18 de enero en Clínica Alemana al procedimiento conocido como dilatación esofágica por balón, con el objetivo de restituir la alimentación por vía oral de productos sólidos.

Los procedimientos quirúrgicos, que beneficiaron a cinco pacientes chilenos y uno argentino, fueron realizados por el médico extranjero Richard Azizkhan, jefe de Departamento del Hospital de Niños de Cincinnati, en conjunto con un equipo de especialistas de Clínica Alemana encabezado por el doctor Claudio Navarrete, jefe del Departamento de Cirugía Mínimamente Invasiva.

Las intervenciones se realizaron en el marco de un encuentro organizado por el doctor Francis Palisson, dermatólogo de Clínica Alemana y presidente de DEBRA Chile, fundación creada para ayudar a quienes sufren de esta enfermedad, más conocidos como «niños piel de cristal».

Esta dolorosa patología de origen genético se caracteriza por la formación de ampollas y erosiones provocadas por el más mínimo roce o incluso sin motivo aparente, las cuales surgen tanto en la piel como en las membranas mucosas de boca, esófago, faringe, vías urinarias e interior de los párpados y las córneas.

En la vía digestiva superior la ingesta de alimentos sólidos puede provocar una erosión de las paredes del esófago, lo que origina una cicatrización con retracción y estrechez. Por este motivo los afectados sólo pueden alimentarse de líquidos, lo que finalmente se traduce en una desnutrición y difícil cicatrización de las heridas de la piel.
Las cirugías realizadas la semana pasada para tratar este problema fueron planificadas en el II Simposio Internacional de Epidermolisis Bulosa, efectuado en noviembre de 2005 por la Facultad de Medicina Clínica Alemana-Universidad del Desarrollo y DEBRA Chile, instituciones que trabajan hace dos años en conjunto con el Hospital de Niños de Cincinnati elaborando protocolos de investigación. En esa oportunidad, el doctor Azizkhan evaluó más de 80 casos graves y seleccionó los más complejos para operarlos ahora en enero.

El especialista explica que «estas intervenciones son de alto y rápido impacto sobre la calidad de vida de los pacientes, ya que aquéllos que sólo podían tragar saliva, dos horas después del procedimiento estaban comiendo helado y 24 horas más tarde, alimentos sólidos, lo que se traduce en bienestar tanto físico como psicológico».

El doctor Francis Palisson sostiene que «la experiencia de especialistas extranjeros sumado a la gran capacidad técnica y humana del equipo de anestesia y cirugía mínimamente invasiva de Clínica Alemana ha permitido realizar por primera vez en Chile este tipo de cirugías, las que pretendemos continuar practicando en el futuro».

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Categoría: Actualidad Médica.




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