Hipotiroidismo subclÃnico
Una de las patologÃas que más inadvertida pasa en las consultas médicas es el hipotiroidismo subclÃnico, que puede llegar a afectar al 8-10% de la población femenina. Sus difusos sÃntomas y la escasa importancia que se les concede provoca que muchas mujeres -que son las mayormente afectadas- vivan en un permanente estado de cansancio, con dolores musculares y recurrentes episodios de somnolencia. El aumento de peso, otro de los sÃntomas más habituales, es considerado como algo inherente a la cercanÃa de la menopausia -edad en la que es más habitual el hipotiroidismo subclÃnico-, con lo que la enfermedad está infra-diagnosticada y quienes la padecen asumen que deben conformarse, cuando lo adecuado serÃa que un endocrino estudiara su caso.
SÃntomas poco especÃficos
Ubicada en la parte anterior del cuello, debajo de la laringe, la glándula tiroides segrega unas hormonas que regulan numerosas funciones del organismo, de ahà que su buena marcha sea esencial. Las hormonas tiroideas clave son la tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3). A su vez, el funcionamiento del tiroides está regulado principalmente por la TSH, una hormona estimulante producida por la hipófisis, pequeña glándula situada en la base del cerebro. Cuando aumenta la actividad de la tiroides se habla de hipertiroidismo y cuando baja por debajo de lo normal de hipotiroidismo. Ambas disfunciones cursan con sÃntomas claros y evidentes que permiten un diagnóstico basado en la sintomatologÃa y confirmado por exploraciones y análisis de sangre. Pero en muchas ocasiones hay una menor actividad tiroidea, tan discreta y sutil, que los sÃntomas son poco evidentes y especÃficos. Incluso puede no haber sÃntomas, lo que ha obligado a elaborar un nuevo concepto, el del hipotiroidismo subclÃnico.
¿Qué es el hipotiroidismo subclÃnico?
Se define como la alteración en que la TSH se encuentra elevada y las hormonas tiorideas, T3 y T4, dentro de la normalidad. Se trata, por tanto, de un concepto bioquÃmico y dentro de él hay varios grados en función del aumento de la TSH. Este trastorno ocurre en un porcentaje de población que varÃa entre el 5% y el 13,2% en los estudios realizados. Es más frecuente entre las mujeres a partir de los 40 años, grupo en el que se han encontrado prevalencias del 8-10%. En mujeres mayores de 60 años afecta a más del 12%, e incluso algunos estudios apuntan a que podrÃa llegar al 30%. En los hombres la incidencia es inferior y se puede decir que la proporción respecto a las mujeres es de uno a cuatro.
No está claro por qué las mujeres lo padecen más, pero parece que se relaciona con los niveles de estrógenos y cambios hormonales, y se apunta como posible causa al paso de células del feto a la madre durante el embarazo (el periodo post parto es también propenso a la aparición de este hipotiroidismo). Estas células ‘extrañas’ provocan la formación de anticuerpos contra el propio tiroides, una forma de enfermedad autoinmune. De hecho, la tiroiditis de Hashimoto, una patologÃa autoinmune en la que el sistema inmunológico ataca y destruye las propias células, es la causa más frecuente de hipotiroidismo en niños y adolescentes en áreas sin déficit de yodo. Y es que el yodo es fundamental para la formación de hormonas tiroideas; el defecto de yodo es la causa más frecuente de hipotiroidismo y bocio en el mundo. Por ello conviene garantizar el aporte de yodo al organismo.
SÃntomas
Por definición, el término subclÃnico implica la ausencia de sÃntomas, pero en realidad esto no es asà en la mayorÃa de los casos. Numerosos estudios han evidenciado que las personas afectadas sufren una serie de sÃntomas que suelen atribuir al estrés, cansancio, falta de vitaminas o al exceso de trabajo, por lo que pocas veces acuden al médico.
Las hormonas tiroideas, la T3 y la T4, dan ‘vida’ a diferentes órganos del cuerpo y su déficit, aunque sea mÃnimo, produce una ralentización de esas funciones. Por ello, los sÃntomas que aparecen pueden ser muy variados y muchos de ellos se han achacado al hipotiroidismo. Pero diversos estudios coinciden en los sÃntomas realmente asociados a una menor función tiroidea: dolores musculares, cansancio o astenia, sequedad de piel, aumento de peso, somnolencia, alopecia y caÃda del cabello.
No se ha encontrado todavÃa una asociación significativa con los siguientes sÃntomas: pérdida de memoria, sordera, estreñimiento, depresión, intolerancia al frÃo y sÃndrome de apnea obstructiva del sueño. No obstante, estas últimas manifestaciones aparecen con más frecuencia en personas con hipotiroidismo, aunque las diferencias no son estadÃsticamente significativas respecto a grupos control.
Es más frecuente entre las mujeres con más de 40 años
Una alteración que sà se asocia de forma clara al hipotiroidismo subclÃnico es la del metabolismo lipÃdico. En las personas afectadas hay un incremento del colesterol total y de los triglicéridos, y parece que también, aunque este punto no está muy claro, desciende el HDL-colesterol (colesterol bueno) y aumenta el LDL-colesterol (colesterol malo). Como consecuencia de esta alteración lipÃdica se incrementarÃa el riesgo cardiovascular. Algunos estudios confirman que el hipotiroidismo subclÃnico es un fuerte indicador de riesgo cardiovascular, pero otros no han encontrado diferencias y este tema está actualmente en estudio y debate.
Asà pues, la necesidad de detectar los casos de hipotiroidismo subclÃnico viene determinada por lo beneficioso que puede ser el tratamiento y porque algunas formas pueden evolucionar hacia insuficiencia tiroidea clara y evidente, y pasar de subclÃnico a clÃnico.
Diagnóstico
Se basa en la determinación de hormonas T3, T4 y TSH, y hay que hacerlo cuando se presentan sÃntomas inespecÃficos en mujeres de más de 40 años, hay antecedentes de hipotiroidismo congénito en tratamiento, se ha tenido hipertiroidismo tratado, hay antecedentes de irradiación del cuello, de cirugÃa o irradiación de la hipófisis y se sigue tratamiento con amiodarona o litio.
Tratamiento
Se considera que debe tratarse cuando:
•Los niveles de TSH son superiores a 10-20 mU/L
•Hay presencia de bocio (aunque no hay unanimidad en este punto)
•Hay sintomatologÃa (dolores musculares, cansancio, alopecia…)
•Se asocia a la presencia de anticuerpos antiperoxidasa (en este caso las probabilidades de evolucionar hacia un hipotiroidismo franco y evidente son elevadas)
•Hay hipercolesterolemia y alteración de las fracciones lipÃdicas, si bien este punto es también objeto de controversia, aunque a la luz de la evidencia disponible parece razonable tratarlo por lo menos hasta ver la respuesta al tratamiento.
El tratamiento con hormona tiroidea, levotiroxina, en la mayorÃa de los pacientes es para siempre y requiere controles rigurosos del perfil hormonal, ya que tanto la sobredosificación como las dosis bajas podrÃan tener consecuencias y no garantizar los niveles hormonales adecuados. Si la dosis es la adecuada no hay efectos secundarios significativos.
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Categoría: Glosario Médico.
2 Responses to “Hipotiroidismo subclÃnico”
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ami me han dianosticado hipotiroidismo subclinico,hace 10 años y me dicen que los sintomas que tengo no es de los tiroides ,padesco de calambres fatiga dolores musculares, y articulares hormigueo de la piel, no tolero el calor problemas de las uñas sensacion que se me estan despegando, problemas digestivos, dolor de cabeza, problema de tragar,problema del habla, nervios ansiedad depresion, ardor de la vita, se me hicha la cara y dolor,dolor de oido , lguin me puede orientar ya he visitado varios especialistas, si alguien sabe algo le agradeseria.
Hola, mi nombre es Candela.
Me encuentro enormemente enfadada indignada con todos los médicos que me han visitado durante más de 7 años y no han sido capaces de ver que lo que tenÃa era un bocio de más de 4 cm.
Les explicaba todos mis sÃntomas, y ni caso.
Afortunadamente un dÃa fuà a un doctor de cabecera y me escuchó y se fijó con la dificultad que tragaba mi propia saliva.
Quiero agradecerselo, Dr. Pedraza del ambulatorio de un pueblo de Barcelona Abrera.
Me han dicho que me lo tienen que operar, y no se si este infierno que estoy pasando acabará cuando me quiten la tiróide.
Mi recomendación serÃa que los médicos observaran más al paciente, no tanto al ordenador.
Sigo enfadada pues son tantas las veces que no se me ha echo ni remoto caso,que ahora ya no tiene sentido nada.
Soy de las personas que siempre he creido que la responsabilidad de mi salud es mÃa y no de nadie más, ahora me arrepiento no haber estudiado la carrera de medicina y de esta manera me podrÃa haber ayudado a mi misma.