Melfalán (Oral)


¿QUÉ ES?
El melfalán pertenece al grupo de medicamentos llamados agentes alquilantes. Se usa para tratar algunos tipos de cáncer.

Si algo de la información en este folleto le causa preocupación especial o si desea más información acerca de su medicamento y su uso, consulte con su médico, enfermera o farmacéutico. Recuerde, mantenga éste y todos los demás medicamentos fuera del alcance de los niños y nunca comparta sus medicamentos con otras personas.

ANTES DE USAR
Hable con su médico acerca de los posibles efectos secundarios de este medicamento.

Algunos de ellos pueden ser serios o de larga duración.

Dígale a su médico, enfermera y farmacéutico si usted . . .

es alérgico a cualquier otro medicamento, ya sea recetado o no;
está embarazada o piensa quedar embarazada mientras esté usando este medicamento o si piensa tener hijos (para hombres y mujeres);
está dando el pecho;
está tomando cualquier otro medicamento recetado o no;
tiene cualquier otro problema médico, especialmente varicela (incluyendo exposición reciente), herpes zóster (culebrilla), infección, o enfermedad del riñón;
ha sido tratado alguna vez con radiación o medicamentos para el cáncer.

USO APROPIADO
Tome este medicamento tal como le indicó su médico. No tome ni más ni menos de ello ni lo tome por más tiempo de lo que le haya mandado su médico.

Mientras esté usando este medicamento, puede que su médico quiera que tome más líquidos para que orine más. Esto ayudará a prevenir los problemas del riñón y a mantener a sus riñones funcionando bien.

Este medicamento frecuentemente causa náuseas, vómitos y pérdida del apetito. Sin embargo, es muy importante que siga usando el medicamento, aunque empiece a sentirse enfermo. Pregúntele a su médico, enfermera o farmacéutico acerca de maneras de disminuir estos efectos.

Si vomita poco después de tomar una dosis, consulte con su médico.

Si se le pasa una dosis de este medicamento, no tome la dosis olvidada para nada ni tome doble cantidad para la dosis siguiente. En vez, vuelva a su horario regular de dosificación y consulte con su médico.

Para guardar este medicamento:

Guarde fuera del alcance de los niños. Guarde el medicamento alejado del calor y la luz directa en su envase de vidrio original. No lo guarde en el baño, cerca del lavaplatos en la cocina o en otros sitios húmedos. El calor o la humedad pueden deteriorar el medicamento. No conserve medicamentos cuya fecha haya expirado o que no necesita más. Asegúrese de desechar sus medicamentos en un sitio fuera del alcance de los niños.

PRECAUCIONES
Es muy importante que su médico revise su progreso mediante visitas regulares para asegurar que este medicamento esté funcionando correctamente y para revisar si hay efectos no deseados.

Mientras se esté tratando con este medicamento, y una vez que termine el tratamiento, no se dé ninguna inmunización (vacuna) sin la aprobación de su médico.

El melfalán puede reducir el número de glóbulos blancos en su sangre temporariamente, aumentando la posibilidad de contraer una infección. También puede reducir el número de plaquetas, que son necesarias para la coagulación correcta de la sangre. Si esto ocurre:

Evite las personas con infecciones.

Tenga cuidado al usar un cepillo de dientes común, hilo dental o un palillo para los dientes.

No se toque los ojos ni el interior de la nariz a menos que se haya lavado las manos recién y no haya tocado nada más mientras tanto.

Tenga cuidado de no cortarse, hacerse moretones o lesionarse.

EFECTOS LATERALES
Efectos secundarios que deben ser informados a su médico inmediatamente

Menos comunes — Heces negras y breosas; sangre en la orina o en las heces; tos o ronquera; dificultad o dolor al orinar; fiebre o escalofríos; dolor en la parte baja de la espalda o en el costado; puntitos rojos en la piel; salpullido o comezón de la piel (repentina); sangrado o moretones inusuales

Otros efectos secundarios que deben ser informados a su médico

Menos comunes o raros — Dolor de las articulaciones; llagas en la boca o en los labios; hinchazón de los pies o la parte baja de las piernas

Efectos secundarios que usualmente no requieren atención médica

Estos posibles efectos secundarios pueden desaparecer durante el tratamiento; sin embargo, si continúan o son molestos, consulte con su médico, enfermera o farmacéutico.

Menos comunes — Náuseas o vómito

Otros efectos secundarios no listados arriba también pueden ocurrir en algunos pacientes. Si nota cualquier otro efecto, consulte con su médico, enfermera o farmacéutico.

Después de que deje de usar este medicamento, puede que todavía produzca algunos efectos secundarios que necesiten atención. Durante este tiempo, consulte con su médico lo antes posible si nota heces negras y breosas sangre en la orina o en las heces tos o ronquera dificultad o dolor al orinar fiebre o escalofríos dolor en la parte baja de la espalda o en el costado puntitos rojos en la piel o sangrado o moretones inusuales.

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Categoría: Medicamentos.




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