La congelación de los tumores alivia el dolor en metástasis óseas


La crioablación, un procedimiento asociado con el tratamiento de los tumores de próstata y riñón al congelarlos, alivia de forma duradera el dolor a los pacientes que sufren la expansión del cáncer al hueso, según un estudio de la Clínica Mayo en Rochester que se ha hecho público en la reunión anual de la Sociedad Norteamericana de Radiología que se celebra en Chicago (Estados Unidos).

El estudio empleó la crioablación para tratar a 34 pacientes en los que el cáncer primario se había extendido al hueso y que no habían conseguido reducir el dolor mediante los tratamientos convencionales. El ocho por ciento de ellos experimentó una reducción significativa del dolor, además, el tratamiento parecía durar hasta 24 semanas después de la intervención.

Según los investigadores, los resultados son importantes por dos motivos. Por un lado la crioablación funciona después de que otros tratamientos hayan fallado y en segundo lugar, proporciona un alivio del dolor a largo plazo. Los autores añaden que la terapia de radiación, considerada la terapia de elección para el control del dolor en los pacientes con dolor localizado asociado a la metástasis del cáncer, proporciona sólo un alivio a corto plazo en el caso de muchos pacientes.

La crioablación consiste en la inserción de una sonda directamente en el tumor guiada con ultrasonidos o mediante imágenes de tomografía computerizada. Es un procedimiento poco invasivo en el que sólo es necesario hacer una incisión de 0,64 centímetros para introducir la sonda. El tiempo de recuperación es muy corto y los pacientes suelen sentir un alivio en su dolor entre uno días y cuatro semanas después del tratamiento

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Oncología.




Deja una respuesta