Acompañamiento durante el parto


Se permite y se estimula el acompañamiento de la madre por el padre o una persona significativa. La presencia del padre fortalece los lazos afectivos y da seguridad a la mujer. La madre necesita compartir con él este momento y sentir que asumen juntos la responsabilidad del hijo que está por nacer.
El Personal debe apoyar y tranquilizar a la madre durante el proceso de preparto, favoreciendo la deambulación controlada, técnicas básicas de relajación, respiración, en mujeres con una evolución fisiológica del trabajo de parto.
La preocupación por la deshumanización de las experiencias del parto ha llevado a la intención de volver a implementar el apoyo continuo y personalizado de mujeres para mujeres durante el trabajo de parto (Klaus 2002). Entre sus elementos comunes se incluyen: apoyo emocional (presencia continua, tranquilidad y elogios), información sobre el progreso del trabajo de parto y consejos sobre técnicas de control, medidas que le brinden comodidad (caricias, masajes, baños o duchas tibios, facilitar la adecuada ingesta y eliminación de fluidos), y representación (ayudar a que la mujer pueda comunicar sus deseos a los demás)2, cumpliendo un rol relevante la profesional matrona/ón en este modelo de atención.
Es importante ser afectuosos, acompañar a la madre, explicarle lo que va a suceder en cada paso del parto, sostenerla cuando es necesario, aclararle dudas, estar atentos a sus necesidades, hablar con ella de frente mirándola a los ojos, le da estímulo, seguridad y reconocimiento cuando avanza en el proceso. Estas medidas tienen por objeto que ella se sienta tranquila, relajada y sin temor de enfrentar el parto, con un efecto sicofisiológico beneficioso, que se traduce en un parto más participativo, más consciente y más relajado.
Las madres que reciben apoyo continuo, tienen un trabajo de parto significativamente más corto, requieren menor cantidad de drogas y anestésicos y menor cantidad de cesáreas, tienen un éxito significativamente mayor en la lactancia que las madres de un grupo control, al tener menos ansiedad post-parto, mejor relación con su hijo, más apoyo y comprensión del padre hacia la lactancia.

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Fertilidad y Embarazo.




Deja una respuesta