Conviviendo con el estrés


En algunas encuestas he visto que cada vez se trabaja más horas a la semana y que la gente tiene una obsesión por estar «siempre on», aún en su tiempo libre… ¡siempre disponible!.Las nuevas tecnologías sobre todo los móviles, a parte de suponer grandes avances para muchos han contribuido  a elevar nuestros niveles sostenidos de estrés. Se duerme menos y peor, y también se tiene comida a mano y por tanto, se come más.La no planificación y el dejarse llevar por la inercia diaria también es un elemento que genera estrés en nuestra vida. Muchas veces dedicamos tiempo a revisar correos, listas, atender llamadas, o a tener la casa a punto etc., dejando de lado cosas tan importantes como nuestros proyectos de futuro, nuestros seres queridos, o el cuidado de nuestra salud?.¿Cómo crees que afectan estas u otras elecciones en tus niveles de estrés?Aprender a separar lo urgente e importante, de lo no-urgente / y no-importante  es algo que si mantenemos en lucha constante puede disparar también ese estrés latente y traer consecuencias indeseables para nuestra salud.El conseguir diferenciar lo urgente e importante, lo que necesita de nuestra intervención inmediata del resto de tareas, es una prioridad que comienza por aprender a decir NO, tanto a los demás como a aquellas cosas, interrupciones, tentaciones etc. que nos alejan de lo que es prioritario e impactará significativamente en nuestros resultados y bienestar.A parte de relajarte, aprender a respirar mejor, saber decir NO a tiempo, hacer ejercicio… ¿sabes identificar lo que te estresa? ?sabes qué parte de ti se resiente por ello? ¿quieres cambiar y no encuentras cómo? Pidenos más información aquí

Califica este Artículo
0 / 5 (0 votos)

Categoría: Psicología y Psiquiatría.




Deja una respuesta